Osadía, estúpida osadía.

Una luz cegadora apenas dejaba sombras sobre el húmedo suelo.
Una figura a penas distinguible se me acercó decidida.
Y ahí es donde la reconocí.
- Que haces aquí? No esperaba verte hasta dentro de mucho tiempo...- Dije sin mucho asombro
- Tú y yo sabemos bien a que he venido.- Respondió con cierto aire de superioridad
- Simplemente te diré. No te temo, se que eres la representación cobarde de la suma de los miedos de tus víctimas. Por el simple hecho de llevar a cabo tu labor te crees mandataria de tierra y firmamento. Te diré una sola palabra que tu no conoces pero los que vivimos en el campo de la sangre sí, "Osadía". La magnífica acción de enfrentarse y rehusarse, de no temer y arriesgarse. - Haciendo una pausa proseguí - Para ti todo fue fácil, solamente dar órdenes aquí y allá. Acompañar a un puñado de ilusiones fragmentadas a través de un puente y ver el pánico en sus rostros no te convierte en osada...
Luego la luz cesó un poco y pude divisar un rostro humano con cara de obnubilación y miedo.
- Acaso te he derribado con mis palabras? A ti, dama de la oscuridad? - Dije con tono solemne
Un alarido de dolor fue sucedido por una explosión de destellos de luz, quienes al apagarse, dejaron todo tal como estaba.
Tumbado en el campo, cerré mis ojos, suspiré y...

Saludos
Nanshe

daaa que siga! buena muy buena