Nuestros Orígenes.

Se vió como los “Prototipos” de razas corrían de territorio en territorio buscando refugio, alejándose de sus predadores y del desastre. Fueron dividiéndose en diferentes terrenos: los que ahora se hacen llamar “humanos”, fueron dispersándose por muchos ecosistemas en busca de alimentos, viviendo en llanuras, cazando pequeños y medianos animales, recolectando frutos de árboles. En cambio, los “elfos”, prefirieron vivir muy acercados a la naturaleza, amigos de los árboles, de los animales, solían comer de las ramas de los ciruelos, o bien vallas retiradas de algún pequeño arbusto, siempre defendían a sus queridos acompañantes, siendo frecuentemente más que simples amigos.
Así ambas razas comenzaron a tener sus diferencias, poco se sabe del desarrollo de la oreja de un elfo, quienes también se caracterizaron por ser muy inteligentes, capaces, y veloces. Aprendieron a utilizar el arte arcano. Nunca se supo el porqué de la hechicería, pero estos podían lanzar temibles relámpagos, como también desaparecer de la vista de cualquier poblador. Los humanos, desarrollaron una enorme vitalidad, fuerza y astucia. Mucho tiempo después que sus camaradas de alargadas orejas, los humanos desarrollaron la “Magia”.
“¿Cómo surgieron los enanos?”
Según una leyenda, un noble humano se cruzó con una hermosa elfa, trayendo al mundo algo nunca antes visto: un ser de poca estatura, con contextura física amplia, pero poco inteligente. Esto no duró como un secreto, y al enterarse los Monarcas, decidieron… ¡exiliarlo para siempre! Logró sobrevivir cerca de las montañas, en una caverna, cuidado por sus padres. Su fuerza y resistencia eran admirables, un cuerpo fornido, con el tiempo llegó a convertirse en un admirable guerrero. A pesar de ser repudiado por los demás, “Prima dwarf” (el primer enano) logró, junto con su amada esposa humana, tener tres hijos como él. A partir de esto, esta raza fue desarrollándose cada vez más.
Pero, los humanos, invadidos por la envidia, desterraron al pequeño pueblo enano cerca de las montañas, en condiciones lamentables. Pese a la adversidad, la resistencia fue más, y los enanos pudieron afianzar su voluntad y generación por generación, acrecentar su fortaleza, volviéndose inmunes a esta precaria vida.
A pesar de tales diferencias, los 3 pueblos lograron una armonía, que duró poco, ya que, siempre que existe la bondad, también existe la maldad.
“Primeros Drows”
El elfo era un bondadoso ser amistoso con la naturaleza, pero, algunos de ellos, disconformes con su vida, fundaron una logia llamada “Tenebrae”. Utilizaban la magia para torturar pobres e indefensos animales, y hasta llegaron a asesinar miembros de su propia raza. Cada vez eran más, cada vez más fuertes, y cada vez más viles. Con el paso de tiempo fueron apartados de los demás elfos, destinados a vivir solos en los pantanos, muy lejos del bosque. Desarrollaron un odio devastador para con todos los demás, se dice que ese mismo odio los llevo a tornar su piel oscura, tal como las aguas de las ciénagas donde estaban.
Con el tiempo, se convirtieron en los peores seres jamás antes vistos.
“Nacimiento del Gnomo”
Un gnomo, un ser de menor estatura aún que el enano, pero débiles, de poca vitalidad, con una agilidad e inteligencia inigualables. Todo comenzó cuando un elfo, quiso ser más que los demás, su ego lo llevó a asesinar a sus pares con tal de obtener poder, y, al ser descubierto, confinado a la vida solitaria.
“Carmine solitude!” gritó el encargado de lanzar el maleficio sobre tal avaricioso ser. Desde ese entonces, en un entorno que no conocía, con un aspecto reducido, sin fortaleza, sobrevivió como pudo. Dedicó su vida a un hechizo tan fuerte como para crear nuevos seres iguales a él. Lo llamó hechizo vital, y recién veinte años después de intentos e intentos fallidos, logró perfeccionarlo. Con la poca vitalidad que le quedaba, lanzó el conjuro unas cinco veces, saliendo de cada relámpago, un ser de baja estatura, con un frágil cuerpo: el GNOMO. Así ellos pudieron desarrollarse con los suministros que su creador dejó, aumentó su población en cantidades. Mucho más amables, regresaron a la cercanía del bosque, para vivir en armonía junto con todos los demás.

Más allá de las razas, queda todavía mucho para hablar sobre el origen del mundo, pero eso, es historia para otro día.

Aclaración: Esto está sujeto a posibles cambios, como verán, el comienzo está inconcluso, ya que, eso es algo que todavía no puedo revelar. El desastre al que huían, eran desastres naturales ocurridos frecuentemente en esa época, tales como terremotos, maremotos, erupciones, etc.

El caos es proporcional al equilibrio, mientras más equilibrio existe, menos caos sucede.
El origen de los humanos, o mejor dicho, su evolución, estaban mejor detallados en el principio que no agregué. Los humanos evolucionaron desde un "Ser prehistórico".
Los elfos también, pero es más secreto su desarrollo.

Jorge, que Rol mas grande tienes Dios!.. como sacas estas!!

Buenisimas..